DE LA ESTÉTICA DE "CLASE" A LA ESTÉTICA JOVEN
La alta costura a medida nos revela un hundimiento de su clientela; esta cruda realidad se asocia a sus precios prohibitivo, haciendo una comparación con el pret-a-porter que ahora ofrece ropa de alta calidad en cuanto a moda, estilo, originalidad a precios incomparables.
El precio medio de un vestido pret-a-porter de creador o de modisto es diez veces menor que uno de alta costura a medida.
Las clases dominantes ya son lo bastantes seguras de su propia legitimidad como para no tener necesidad de lucir los emblemas de su autoridad. El destino de la alta costura, por un lado, incuestionable mente el fenómeno es una ruptura con la moda centenaria; pero por otro aparece como el momento culminante de una tendencia secular constitutiva de las sociedades democráticas.
El sistema de la moda, tiene nuevos valores contemporáneos, lo "junior" se a convertido en prototipo de la moda.
La moda ha adquirido una connotación joven, debe expresar un estilo de vida emancipado, libre de obligaciones y desenvuelto respecto a los cánones oficiales. El significado imaginario de "joven" ha conllevado un desinterés hacia la ropa de lujo, asimilada de repente al mundo "viejo".
Representar menos edad importa hoy día mucho masque exhibir un rango social.
"La gente ya no desea ser elegante, quiere seducir"
LA MODA EN PLURAL
Ya no hay moda, hay modas. La moda estalla en singulares e incomparables colecciones, cada creador prosigue su propia trayectoria anteponiendo sus propios criterios. Creaciones totalmente libres, tanto en el arte como en la moda.
"Hay 4 look que vuelven siempre. Primero, las blusas amplias que sirven también como minivestidos; después la moda "victoriana", femenina, sin escote, suave. Luego, el look "muñeca", divertido, alegre y la moda "chico", deportiva y masculina". En toda colección esos 4 looks son la base.
MASCULINO-FEMENINO
La ropa masculina ha dado un paso en la dirección de la moda femenina al incorporar la fantasía como uno de sus parámetros básicos.
"La vida es demasiado corta como para vestir tristemente".
La división enfática e imperativa en la apariencia de los sexos se difumina, y la igualdad de condiciones prosigue su tarea poniendo fin al monopolio femenino de la moda y "masculinizando" parcialmente el guardarropa femenino.
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